Iroel Sánchez: «Siro, ¡qué pesadilla! ¡Cómo tenía LIKES y no podía verlos.»

Mientras muchos en el mundo entero andan preocupados por las Elecciones presidenciales en los Estados Unidos, en días pasados ocurrió una hecatombe en la Habana.

Yo estaba ajeno a todo, practicando yoga y mis clases de magia, cuando de pronto me enteré que a mi amigo Iroel Sánchez le habían tumbado su perfil de Facebook. ¡Me entró un dolor en el pecho de esos que me dan a mi! Qué bien sabe él como a mí me gusta escribirle por el chat a cada rato.

Porque claro, bien que reza el refrán: «todos los pájaros comen arroz…» y como yo desde hace un tiempo para acá me había tomado un asueto en la escritura – ya veo que no vale la pena -, y estaba ejercitando mis habilidades cibernéticas, intuí, con esa audacia que tengo, que mi nombre ahora se convertiría no en lo que siempre ha sido, sino en algo parecido a un Marcos Pérez.

¡Qué manera de haber fango!¡Qué chapoleteo! ¡Qué chisporreteo! ¡Menos mal que tenemos periódico!

Pero claro, hay gente que se inventa historias, que no da pie con bola, y como no tienen mucha materia gris, inventan – por ejemplo – que los periodistas que fueron a Guantánamo, fueron a hacer Zafari (la Z es intencional), o que son asalariados del imperio, o mercenarios, o apátridas. Qué todos los que disienten en algo, son contrarrevolucionarios, que todos se venden, … en fin, ¡hablan tanta…, que mienten!

¿Qué pasó con lo de Paypal? Andaban buscándole la 5ta pata a una mesa, que era un trípode. ¡Qué mentes más fértiles por Dios! Y yo me pregunto: ¿es esto lo que nos espera? ¿es esto lo que queremos? ¿para esto es que muchos se jodieron? ¡Joder! ¡Qué porvenir tan jodido! Y gris..

Y yo, lo repito, estaba ajeno a todo, y de pronto pum…

¡Pero hay que ser bruto para creerse eso de «La Máquina tumbadora de perfiles» Eso solo se le puede ocurrir a alguien que no sepa ni pitoche de lo que habla. ¡Y el pataleo que han formado! ¡Con lo fácil que resulta resolver eso! Pero es que hay poca masa.

Yo me pregunto, ¿por qué no protestaron con igual vehemencia por las escuálidas notas que en el Granma, y en el Juventud, le dedicaron a un actor como Reynaldo Miravalles que durante más de 40 años solo vivió para darle gloria a la cultura y al pueblo cubanos? ¿Contra eso no protestan? ¡Qué suerte tengo de trabajar en DDR!

En fin, como yo nunca me escondo, ni esquivo contestarle a Silvio Rodríguez, ni me voy por una puerta lateral si de frente viene fulano, o no voy a tal lugar porque ahí está seguro mengano, ni utilizo tribunas de papel cuando puedo decir las cosas de frente, ¿qué hice? ¡Entrevistar una vez más a mi amigo Iroel Sánchez!

El pobre, apenas le dije que iría a visitarlo se me confesó desanimado.

Yo sé qué es duro, perder foticos, recuerdos, pero digo yo: ¿qué tuve que ver yo con todo eso? ¡Nada! Si hubiese sido, lo digo, sin miedo, ¡de frente y ya!, pero no… y mi jefe me lo ordenó:

«Siro, tienes que aclarar eso»

Entonces me llegué, una vez más a casa de Iroel Sánchez. Y… ¿saben qué? ¡no me quería abrir!

iroel-sanchez-cuba-580x326Siro Cuartel: Iro, Iro… ¡ábreme la puerta! ¡No te cierres! ¡Ábrete sésamo!

Iroel Sánchez: ¿Pero tú de nuevo? Vete, vete… mira, ¡no me desgracies! Veteeeeeee

Siro Cuartel: Pero coño… no te escondas, hazte la idea que estás en Angola… en la retaguardia. No te asustes, vengo en son de paz.

Iroel Sánchez: Deja, deja… mira, yo mejor te contesto en La Pupila. Vaya, compadre, es que se me hace incómodo darte la cara. No estoy acostumbrado… 

Siro Cuartel: Coño chico, no seas así… mira que te traje un regalito.

IS: (interesado) ¿Si? ¿Qué es?

SC: Una máquina.

IS: ¿¡¡¡De tumbar perfiles!!!? 

SC: No, de sacar mocos. Así no tienes que sacártelos tú. Compadre, es que cada vez que te veo en esas reuniones metiéndote el dedo… coño, Iro, ¡eso se ve feo! ¡Por eso es que tienes esa nariz tan desproporcionada!

IS: Coño compadre, eso es una mala manía que tengo desde chiquito… ¡qué le voy a hacer! ¡Ayúdame Siro!

SC: Si abrieras la puerta….

(Iroel abre la puerta)

IS: Coño compadre… ¡me jodiste! 

SC: ¡Qué no fui yo, joder! 

IS: No te hablo de lo de Facebook, ya eso pasó, te hablo de la máquina… ¿dónde está la máquina? Mira que no la veo…  y mira pa este hueco… lo tengo cargao. ¡Dáme la máquina que me prometiste!

SC: Toma chico… toma… 

IS: Es mía… mía… mía

SC: Coño Iro, no te pongas como el Rajá del cuento del Antílope Dorado… Oye, como te decía, vengo en son de paz. Te vengo a entrevistar por lo de los tractores Oggún.

IS: … Iya mi ile odo Iya mi ile odo gbogbo aché…

SC: Deja a Adalberto tranquilo compadre. Iro, te hablo de los tractores… los tractores americanos de la empresa Cleber ¿cómo es eso qué no estás de acuerdo con lo de los tractores? Iro coño, con la necesidad que hay de echar a producir esas tierras ociosas y llenas de marabú; con la necesidad que hay de poner aunque sea un boniato en una mesa, ¡y tú oponiéndote a lo de los tractores! Iro… ¿qué tú comes? ¿dónde? ¿tú vas al agro? ¿te alcanza la cuota de la libreta? Vaya, estas preguntas no las traía anotadas pero ahora se me ocurrieron y tenía que hacértelas.

IS: ¿Qué quieres que haga compadre? Si yo nací con este estigma de nadar en contra  de la corriente.. Coño, que rico está este… ¡mira como se estira!

SC: Asere, ¡bota el moco ese! ¡Fíjate que me voy! 

IS: No, no te vayas… please, don´t go! Siro, ¿y eso que tienes en la mano izquierda qué es? 

SC: Una gorra de policía.

IS: ¿Y en la derecha?

SC: Mi bolso, con mi laptop.

IS: ¿Y pa qué…? coño compadre, me confundes… ¿Me vas a meter preso? ¿me vas a mandar a matar?

SC: Yo me llamo Siro Cuartel.

IS: Es que esa gorra… no sé qué haces con esa gorra encima. He de reconocer que tienes esa virtud. Coño compadre, no me enredes con esas jerigonzas inteligentes que tú metes, que sabes bien tuve problemas y no pude entrar a la ESVOC de Santa Clara. ¿Para qué es la gorra de policia?

SC: Tranquilo compadre, vengo a hacerte una demostración de magia.

IS: ¿Me vas a desaparecer? Coño, déjame terminar un artículo ahi que estoy escribiendo en La Pupila. ¡Deja que lo leas! Se titula: «Cancerbero en Chile, nicht Sprechen Deustch; das ist ein weiterer Freund»

SC: Deja eso, mira pa´aca. ¿Ves? Abro la computadora…

IS: Sí, sí, veo… 

SC: Y ahora… ¡me pongo la gorra!

IS: ¿¿¿¿Ehhhhh??? Sirooooooooooooooooo ¿dónde estás? Sirooooooooooo ¡¡¡no te veo!!!

SC: Aquí estoy, dentro de la computadora…¿no me ves?

IS: ¡Wooooooooooooow! Oye, ¿y qué haces ahí?

SC: ¡Soy ciberpolicía!

IS: Alabaooooooooooooooo coño, sal de ahí… ¡no me toques mi Facebook!.. que coño, ¡cagué sangre para poder recuperarlo!

SC: Ok salgo…

IS: Mira… ¿sabes qué? ¡No me das envidia! Yo también soy Ciberpolicía, lo que no me tengo que meter dentro de una computadora. Ademas, ¡soy ciberpolicía bueno!

SC: Pero entonces… ¿por qué te asustaste?

IS: Coño man,  es que no te veía. Sabes, no tienes idea de lo mal que dormí estas últimas noches. Siro, ¿tú sabes lo que es saberte mentado, comentado, likeado y compartido y no poder verlo? ¡Tenía un dolor! Hasta pesadillas tuve… soñé que tenía muchos likes, y cuando iba a verlos se me alejaban… y yo intentaba alcanzarlos con la mano y se me alejaban, se me perdían en el infinito. Sabes, los likes no son como los mocos; esos siempre logro agarrarlos por muy inteligentes que sean, o por muy lejos que se me escondan. Pero te decía… ¡qué pesadilla Siro! ¡No podía tocar mis likes, y tampoco podía verlos!  

SC: Cuando eso te vuelva a pasar Iro, vuélvelos a pedir de vuelta. Total, si a tí siempre te dan like los mismos.

IS: Qué cruel eres conmigo compadre…mira ¡qué no vas a poder venir más!

SC: ¡Y no vengo!

IS: Vaya… ¡que asusto a tu familia! ¡A qué llamo a tu mamá y le digo que te secuestraron!

SC: ¡La mamma! Coño, con la mamma no te metas… déjamela tranquila en California. ¿Ok? Mira, sigamos con las clases de magia. Mira esto que tengo aquí.

IS: Terroristaaaaaaaaaaaaaaaaaa ¡lo sabía!  ¡No te metas en la computadora! ¡No la sueltes!

SC: ¡Si sueltas el moco, te prometo no la suelto!

IS: Vale…boto el moco… ah coño, si es una bomba de gasolina. Coño Siro, ¡me jodiste de nuevo!

SC: Jejejejeje

IS: Tengo tanto que aprender de tí. Tengo mucho que aprender de ti.

SC: No doy clases, I´m sorry..

IS: Tú lo que eres un zorro. Coño Siro compadre, no seas malo… ¡enséñame a tumbar perfiles! Sabes, tengo unas ganas de desaparecer a unos cuantos… ¡no sé pa que se atraviesan! Me da lo mismo en el lado que estén, si a la izquierda, si a la izquierda centro, o a la derecha, o a la derecha centro, o si son centristas completos.

SC: Eso de centrista me suena a indirecta con….

IS: ¡Tú sabes!

SC: ¿Periodistas? ¿Cubanos?

IS: ¡Y uruguayos! Incluso, italianos.

SC: ¿Trovadores?

IS: Con todos menos con uno.

SC: ¿Y con el hijo del trovador?

IS: Mmmm ¡tampoco! Mira, dejémoslo en periodistas, sí son recién graduados mejor, así no los conoce nadie, y nadie puede sacar la cara por ellos, si son del interior, mejor todavía.

SC: ¿Qué escriban en medios alternativos?

IS: ¡Esos! Los de El Toque hace rato que me están buscando las cosquillas… ¡si los toco, los desaparezco fíjate!

SC: Pero… ¿por qué te molesta que escriban en medios alternativos?

IS: No es porque escriban en medios alternativos, es…

SC: ¿Por qué?

IS: Por lo que escriben… por lo que escriben.

SC: ¿Te duele cuándo escriben?

IS: Me duele cómo escriben Siro, me duele mucho.

 

3 comentarios en “Iroel Sánchez: «Siro, ¡qué pesadilla! ¡Cómo tenía LIKES y no podía verlos.»

  1. Casi lloro de la risa. Los que estaban cerca de mi me miraban como si estuviera loca, no pude aguantar las carcajadas…una máquina de sacar mocos!!!!!!!!!jajajajaja, jajajaja. Pero lo mejor, sin dudas, fue el final; lo adoré!!!

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