Yoerky Sánchez: «Siro, el discurso de Obama fue un discurso muy malo.

Me encanta la gente humilde. La gente sencilla. Esos que llegan a escalar altos puestos públicos saliendo de… pues… no sé cómo explicarlo… Quiero decir, que salen de abajo, de la masa, de lo más autóctono de nuestras raíces obreras y campesinas. ¿Y qué campesino en este país no recita una buena décima?

Mi entrevistado de hoy proviene de una de las familias más humildes de Manicaragua. Lo conocí oyéndolo recitar en las Tribunas Antimperialistas por el regreso del niño Elián. Cuando llegué a la Universidad y descubrí que estaba en el aula con él, no pude hacer menos que levantarme de mi pupitre – asiento – e ir a estrecharle la mano. Desde ahí comenzó a forjarse nuestra amistad. Recuerdo, que al salir del aula, Javier Figueroa me dijo, ¿Conoces al Poeta? Y yo le pregunté ¿Qué poeta?

– Ese que acabas de saludar.
– Se llama Yoerky, cómo el pitcher de Las Tunas.
– Su nombre no importa. Nosotros le decimos “El Poeta”
– ¿El Poeta? ¿Cómo la canción de Chino y Nacho?
– Exacto…

¡Sentí tanta admiración! Y luego, cuando fue elegido Diputado a la Asamblea Nacional sentí más admiración aún. Porque no es fácil, salir de Manicaragua, como Juan sin nada, y de pronto, por recitar poesías, llegar con UN NOMBRE a un centro de altos estudios tan prestigioso como la UCLV, y de ahí, por seguir recitando, llegar a ser Diputado a la Asamblea Nacional. Señores… ¡hay que quitarse el sombrero!

Si ya sé que dirán que nuestra Asamblea Nacional es tremenda caca, pero el nombre, el prestigio, no se lo quita nadie: Tú llegas a cualquier país… vaya, llegas a Estados Unidos, por ejemplo, a un Mc Donald, la muchacha que te atiende se da cuenta que no eres de ahí, y en la conversación te pregunta ¿a qué te dedicas? Y tú le dices: “Soy Diputado a la Asamblea Nacional en mi país” y vaya… ¡vaya! Luego pagas y te sientas en la mesa… y la chica se queda pensando… “woooooow”.

yoerky

Yo recuerdo que el Yoer, o Yoerky, siempre tuvo sobre su cabeza esa áurea de que sería alguien. Eso le costó mucho trabajo asimilarlo. Tanto que perdió tiempo en los estudios y raspó algunas asignaturas. Por ejemplo, y esto lo noté en el último de sus artículos, el que escribió para Juventud Rebelde, aún tiene problemas serios en Redacción, Composición y Análisis de Textos. Y la profe Teresita, ahí al lado de él. Pero no podía hacer mucho. Tan pronto avanzaban algo, se lo llevaban para alguna Tribuna. Maisí, Los Palacios, Guáimaro… incluso se lo llevaron para Argelia. No al central Argelia, no, a Argelia, el país. ¡Delegado al Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes! ¡Y todo por recitar poesías! Recuerdo que el día que se lo comunicaron en el aula, no aguantó mucho el júbilo y gritó: ¡SUFRE JOSE ANGEL BUESA! Todos, extasiados, le aplaudimos….

Siro Cuartel: Compadreeeeeeeeee, ya ni me contestas por Facebook. Ni comentas en el Grupo de la gente del aula. ¿Qué te pasa? ¿Te has olvidado de nosotros? He tenido que venir a verte… mucho revuelo ha causado el avance de la entrevista que publiqué hace unos días.

Yoerky Sánchez: Muchas responsabilidades Siro. Muchas reuniones. Tengo el coco echando candela. Oye ¿cómo fue eso que me cuentas? ¿Protestaron? ¿Cómo que protestaron? 

Siro Cuartel: Sí chico, una gente del grupo

Yoerky Sánchez: ¿Los que están afuera no? ¡Es evidente! 

Siro Cuartel: Me dijeron que había obviado algunos detalles. Por ejemplo, que eras honesto, sincero, buen amigo, estudioso. ¡Un gran tipo! Vaya, que no pensaban como tú, pero que eres muy especial para ellos. Yo pensé que esos detalles habían quedado claros en la introducción. Parece que, o no leyeron bien, o no saben interpretar las cosas.

Yoerky Sánchez. ¡Cómo me defienden! El destino los ha apartado de mí, pero no se han convertido en príncipes.

Siro Cuartel: ¿No entiendo?

Yoerky Sánchez: Que no han cambiado el color de su sangre. Todavía es roja. 

Siro Cuartel: Un color difícil de quitar… oye, me has recordado ese tema hermoso de la peli «Habana Blues»… en fín, te veo muy elegante, esa camisita a cuadros te queda bien.

Yoerky Sánchez: Es que hoy viene Alfonsito aquí al diario. Si no hubiese venido con mi pullovito del diario… el NIKE, el ADIDAS.

Siro Cuartel: Una vieja tradición que conservas desde nuestros años de estudios en la Marta Abreus. Usar la ropa adecuada, en el momento preciso.

Yoerky Sánchez: Exacto. Hay que saber mover las fichas… en este caso, quiero decir, mover la percha.

Siro Cuartel: Y veo también, que aún conservas el reloj que te regaló Armando Hart. ¡Ni para hacer Educación Física te lo quitabas!

Yoerky Sánchez: ¡No me lo quito ni para cagar! Y como es waterproof, conmigo va hasta la ducha. Coño Siro, no recordaba al profe Mostacho. He olvidado muchas cosas de mi pasado. Tengo que escribirlas para que no se me olviden.

Siro Cuartel: Coño Yoerky, la memoria es importante. Nuestro pasado no podemos olvidarlo.

Yoerky Sánchez: Eso mismo quiere Obama. Olvidar el pasado.

Siro Cuartel: Dejemos eso para después. Oye, ¿sabes que recuerdo? ahora que mencionabas lo de apuntar las cosas para que no se te olviden, que te gusta escribir. Tenías una agenda donde llevabas una especie de apuntes. Las malas lenguas decían que era ahí dónde anotabas todo lo que decían alumnos y profesores, y que según tu juicio eran “cosas en contra de la Revolución.” Pero a mí siempre me quedó esa duda ¿era aquello Literatura?

Yoerky Sánchez: Aquello, debo reconocerlo, era tremenda mierda. Le agradezco mucho al profe Vázquez por aquel gesto que tuvo. Si es preciso, hablaré con Fernández Retamar, Roberto, para que lo toque con un premio. Sin dudas un día se le reconocerá ese gran aporte que él tuvo con la Literatura cubana, al desmantelar delante de todos aquel entuerto.

Siro Cuartel: Un momento climático sin dudas, el día que el profe agitó aquella libreta negra al viento.

Yoerky Sánchez: Ni me lo recuerdes Siro, ni me lo recuerdes. Oye, y ¿cómo tú recuerdas que era negra?

Siro Cuartel: Me lo recordó… ¿quieres saber quien fue el que me lo recordó?

Yoerky Sánchez: No importa… era curiosidad.

Siro Cuartel: Ese día “El Poeta” dejó de ser poeta.

Yoerky Sánchez: Se me cayó el cartelito; debo reconocerlo.

Siro Cuartel: Yoerky, hablemos de cosas sencillas… ¿Cuál es tu película favorita?

Yoerky Sánchez: INDECENT PROPOSAL. Me identifico mucho con el personaje de Robert Redford.

Siro Cuartel:¿Te gustaría ser millonario?

Yoerky Sánchez: No, pero me encanta el fellatio.

Siro Cuartel: ¿Entonces te encanta el mamading?

Yoerky Sánchez: No me gusta el alcohol, y según sé, porque la gente cree que yo soy medio anormal, pero no, el mamading es para tomar tragos gratis en las discotecas.

Siro Cuartel: ¿Vas a alguna discoteca?

Yoerky Sánchez: No tengo tiempo. Entre el Juventud Rebelde y las reuniones de la Sociedad Civil apenas si puedo…

Siro Cuartel: Ahora que lo mencionas… ¿cómo entraste en eso de la Sociedad Civil? Recuerdo que en nuestra época mencionar a Gramsci…

Yoerky Sánchez: ¡Yo no sé quién me metió a mí en eso! Un día de pronto se me comunicó que yo era de la Sociedad Civil.

Siro Cuartel: Y lo aceptaste, así no más…

Yoerky Sánchez: Fue una orientación de arriba. Y… me ha gustado sabes. Es muy heterogénea. Hay espiritistas, babalawos, gente de billete, psicólogas. A cada rato nos reunimos. Todos tenemos un mismo pensamiento. A pesar de la heterogeneidad, nuestro pensamiento, nuestras ideas son bastante homogéneas. Somos un grupo muy compacto. 

Siro Cuartel: ¿Se reúnen a cada rato?

Yoerky Sánchez: Sí, a veces. Viajamos…

Siro Cuartel: Recuerdo que faltabas mucho a clases por las reuniones. ¿Cómo te empatabas luego con la bola?

Yoerky Sánchez: Realmente nunca me pude empatar con la bola.

Siro Cuartel: ¿Te aprobaban entonces?

Yoerky Sánchez: Digamos que por ser diputado a la Asamblea Nacional los profesores le hacían un favor a la Patria.

Siro Cuartel: Así y todo, recuerdo, que al profe Rojas Guindo lo acusaron de mal profesor porque “te tenía ponchado”.

Yoerky Sánchez: ¡Compadre! ¡Qué memoria tienes! ¿Eso también te lo recordó el mismo que te recordó lo de la libreta negra?

Siro Cuartel: No, esto me lo recordó … ¿quieres o no quieres que te diga nombres?

Yoerky Sánchez: ¡Qué desprestigio! Me defienden pero se van de lengua…  hay que ver que ese «yuma» cambia a la gente compadre.

Siro Cuartel: Muchos años detrás de las cámaras y los micrófonos. Ese oficio no se suelta así como así. Quiero decir, el oficio de informar.

Yoerky Sánchez: Yo espero que lleguen algún día a ser algo… o que inventen algo, o implanten algo, si no serán más de lo mismo. Volviendo al tema Siro, mira que hablé con el profe Rojas Guindo , para que me ayudara, me diera horas extras. No aceptó. Incluso me ofrecí a pagarle… no me malinterpretes. No era soborno no. 

Siro Cuartel: ¿Cuánto?

Yoerky Sánchez: Una bobería… 50 pesos.

Siro Cuartel: ¡CINCUENTA PESOS!

Yoerky Sánchez: Moneda nacional Siro, moneda nacional… No sé en realidad cuánto le ofrecí. Sé que fue algo así.

Siro Cuartel: ¡Casi todo un estipendio universitario!

Yoerky Sánchez: A mí por Diputado me pagaban 40 dólares al mes.

Siro Cuartel: ¡Eso es lo que tú decías!

Yoerky Sánchez: Bueno, no me creas… en fin, a este profesor le insistí. No entró en caja. Entonces “lo comuniqué a mis superiores” Al final terminó aprobándome . Tanto nadar y nadar…

Siro Cuartel: ¿Con ese “estipendio” es que te pagabas el alquiler en Santa Clara? ¡Por qué a Manicaragua jamás volviste! Hiciste como Pedro Páramo.

Yoerky Sánchez: ¿Pedro qué?

Siro Cuartel: Pedro Páramo, el personaje de la novela de Juan Rulfo.

Yoerky Sánchez: Ni a uno ni al otro recuerdo. Siro, yo he tenido que leer mucho a Marx y a Lenin. No he tenido tiempo de leer esas novelitas.

Siro Cuartel: ¿Y cómo estás en el inglés?

Yoerky Sánchez: Todavía flojo. Muy flojo.

Siro Cuartel: ¿How are you?

Yoerky Sánchez: ¿Qué?

Siro Cuartel: Que, “¿cómo estás?” Coño Yoerky, mi hermano, mira que has viajado y aún no has aprendido nada en inglés. ¿Cómo se puede viajar al extranjero, regresar y no saber qué quiere decir “how are you”? Sospecho que escuchaste el discurso de Obama con audífonos.

Yoerky Sánchez: ¡Pues claro! ¡Cómo si no! Siro… ¡un discurso muy, muy malo!

Siro Cuartel: ¿No habrá sido la traducción? ¡Sabe Dios lo que te tradujeron!

Yoerky Sánchez: Hubo varias traductoras, la que me tocó a mí, según lo que me tradujo…

Siro Cuartel: Eso parece sí, que no todos oyeron lo mismo. Sabes Yoer…

Yoerky Sánchez: Me encanta cuándo me dices así.

Siro Cuartel: Déjate de flojeras… mira, sabes que siempre tuve una duda. ¿Cómo caíste de la UCLV al Alma Mater?

Yoerky Sánchez: ¡Igual que cayó Otto Rivero! Fui promovido.

Siro Cuartel: Ah… te tengo un chisme. ¿Sabías que Otto comenzó su carrera política prometiendo reservaciones para el cabaret El Mejunje a quienes votaran por él en las elecciones de la FEU de la UCLV?

Yoerky Sánchez: Yo no prometí nada que Fidel no cumplió. No es mi caso. Yo aún sigo como Manolín. “Encima de la bola”.

Siro Cuartel: ¡Tremenda bola! Yo lo que me pregunto Yoerky, es: ¿cómo, si tú no eras de los más aventajados en el aula, estás dónde estás?

Yoerky Sánchez: Por la política de cuadros. Porque entré por el aro. Aquí no vale título de oro Siro. Mírate a ti. ¡Espabílate! ¡Despierta! Tanta gente que te sigue y no tienes ni este peso. 

Siro Cuartel: Yo espero que las cosas cambien tras este discurso de Obama.

Yoerky Sánchez: Siro, no te lo voy a repetir dos veces: ¡Espabílate! ¡Despierta!

Siro Cuartel: Que estamos en Cuba… estoy tan triste.

Yoerky Sánchez: Mira,… para que no te vayas con las manos vacías de aquí. ¡Te voy a dedicar un poema! ¡Trábalo!

Fidel de nuevo convoca
a la masa estudiantil
con esa fe juvenil
y esa pasión que provoca.
A los jóvenes les toca
ser la fuente, ser la arcilla
y para que la semilla
fructifique un día en flor
deben la paz y el amor
engendrar la maravilla.

Siro Cuartel: Me has hecho llorar compadre. Gracias Yoer… Gracias… gracias.

3 comentarios en “Yoerky Sánchez: «Siro, el discurso de Obama fue un discurso muy malo.

  1. Muy gracioso. Hay que reconocer que Siro sea lo que sea y quien sea, tiene ingenio. La ironía no se le da bien a cualquiera. También estuve en ese grupo y debo reconocer que mucha de la información que obtuvo Cuartel de la vida académica del «Poeta» es sorprendentemente fidedigna. Daría un ojo de la cara por saber quién fue la fuente informativa jejejeje. Ni siquiera recordaba lo de Teresita Gallardo, la profesora de Redacción, Comprensión y Análisis de Textos que tantos dolores de cabeza causó entre la muchachada… jejeje. Ahora bien, no sé si habrá cambiado y la fama se le habrá subido para la cabeza, pero el Yoerkys de entonces era un buen compañero, cordial, amable, sencillo, solidario y aparentemente convencido de sus ideas. Lo valiente no quita lo cortés.

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